25 de noviembre, 2024
garantizar que el tratamiento de datos personales respete la privacidad, seguridad y control de
las personas sobre su información. Su objetivo es asegurar que la recolección, uso,
almacenamiento y transferencia de datos se realicen conforme a principios legales claros y altos
estándares de protección.
Aplica a todas las personas y entidades públicas o privadas que manejen datos personales, de
forma manual o automatizada, salvo excepciones como datos familiares, de seguridad pública o
regulados por leyes específicas.
La ley protege los derechos ARCO-POL, que incluyen:
- Acceso: Conocer qué datos se tienen y cómo se usan.
- Rectificación: Corregir datos incorrectos o incompletos.
- Cancelación: Eliminar datos innecesarios.
- Oposición: Negarse a ciertos usos.
- Portabilidad: Transferir datos a otros responsables.
- Olvido: Eliminar información en entornos digitales.
- Limitación: Restringir temporalmente su uso.
informar claramente a los titulares (transparencia) y aplicar medidas para prevenir accesos no
autorizados (seguridad).
Los datos sensibles, como salud o creencias, tienen mayor protección, permitiéndose su
tratamiento solo con consentimiento expreso o en situaciones excepcionales definidas por la
ley. Asimismo, las transferencias internacionales deben garantizar niveles de protección
equivalentes; de lo contrario, se requieren medidas adicionales.
Los responsables deben garantizar la confidencialidad, designar un Delegado de Protección de
Datos y notificar vulneraciones. La Agencia de Ciberseguridad del Estado (ACE) supervisa,
audita y sanciona incumplimientos, con multas según la gravedad de las infracciones (leves,
graves y muy graves).
Esta normativa representa un avance clave en la protección de la privacidad en El Salvador,
alineándose con estándares internacionales y promoviendo un manejo ético y seguro de la
información personal.
Torres Legal - Comunicaciones
Compartir